14.8.09

La plegaria

Agnóstica como nadie, te he erigido un altar en mi interior. La pena es que no sé rezarte y me limito a dejarte flores frescas cada mañana.
Mientras espero. Espero tu descenso celestial para iniciar tu presentación en sociedad. Ya todos comenzaron a decirme que no eres más que un producto de mi imaginación. Un recurso para dejar de temer a mi soledad cotidiana. Dicen que creer en tu alma gemela tiene algo de fé heredada.
Y aquí me tienes, hilando palabras con las que hacerte un credo etéreo, una plegaria sublime con la cual convencerte para que vengas hacia mí.

Estadísticas