Una de músicos

No soy músico, pero vivo en una constante banda sonora. Muchos momentos importantes que recuerdo de mi vida están relacionados con alguna canción: mi infancia, mi adolescencia, ese beso, esa riña, la carrera, la boda, etc. Pero aunque mi vínculo con la música es muy profundo, nunca hice (por que no supe hacerlo) una canción. Creo que las personas que tienen la habilidad y el sentimiento de hacer una canción, son personas creativas a la vez que poco pudorosas, ya que uno se tendrá que dejar un poco de si mismo cuando hace algo tan bello. ¡Que pleno tiene que ser eso de recrear algo de uno con la música!. El proceso se completa si una vez creado el producto, uno tiene la valentía de mostrarlo en público. Esto es, interpretar en un escenario lo que intimamente creó entre las paredes de su casa. No todos los músicos lo hacen: los hay que componen para otros, no ponen rostro a su composición. Cuando se atreven, se suben a un escenario, delante de una o mil personas y desnudan su arte, para mi se convierten en seres muy valientes que merecen mucho respeto. Pueden cantar e interpretar mejor, peor, afinar, desafinar o lo que sus otras aptitudes le permitan, pero se están dejando algo personal delante de cada micróno. Desde aquí, mi admiración para todos ellos.

La inocencia

Ellos la tienen y no lo saben, por lo que la malgastan sin más. La malgastan tanto que la agotan y cuando llegan a adultos ya no les queda. A veces, te encuentras infantes, a los que se les ha acabado antes de llegar a los diez años. ¡Qué pena!, se convierten en pequeños déspotas que salen en la prensa por maltratar a sus familias y a sus congéneres. Por eso, cuando veo inocencia en los ojos de mis alumnos, saco la cámara y la congelo en su silencio.

La Competición

A veces, a la gente le da por competir dentro de los cánones que su vida marca. Competir por el mejor trabajo, la hipoteca más baja, el coche más caro, etc. Cosas irrelevantes, mirar al vecino por si es igual que uno, por si tiene más o tiene menos, el tanto tienes tanto vales en su versión mas real.
A mi no me gusta competir. Menos me gusta estar metida en competiciones con la gente que me rodea, si estás a mi lado e intentas competir conmigo acerca de algo que nos atañe que sepas que estoy tanteando tu amistad. Si estas a mi lado es para pasar un buen rato, para ayudarnos en el día a día de esta nuestra existencia, para enriquecernos de nuestro tiempo juntos. Tenía que decirlo...